Bacalao confitado con Cantharellus cibarius

 En casa nos gusta mucho el bacalao, tanto fresco como salado, lo preparamos de mil formas, cuando recogemos setas silvestres, no podemos resistirnos a experimentar. Este plato lo cociné la primavera pasada y se me había quedado “traspapelado”. Ahora con la nueva temporada a las puertas, quizás y digo quizás, porque una vez más las lluvias parecen habernos abandonado, podamos encontrarlas.

Es también el pescado favorito de mi padre, recuerdo que de niña era una de las comidas más habituales en casa y recuerdo también que no me gustaba demasiado, a decir verdad no me gustaba demasiado nada, siempre fui lo que se dice una niña “mal comedora”. Parece mentira cuánto se cambia, con la edad vamos aprendiendo a disfrutar de nuevos alimentos, sabores, aromas, e incluso hasta aprendemos a cocinar y deleitarnos con ello. 

 

Ingredientes:

·       Bacalao en trozos

·       Cantharellus cibarius

·       Aceite de oliva

·       Sal

·       Perejil picado

Elaboración:

Lavamos las setas y las dejamos escurrir bien, a continuación ponemos el aceite en una cacerola, calentamos a fuego lento, añadimos las Cantharellus y dejamos que se cocinen muy lentamente, tendremos cuidado para que el aceite nunca hierva, recordad que confitar en aceite es algo similar a cocer, si dejamos que el aceite se caliente demasiado lo que haremos será freír y ese efecto no lo deseamos para este plato.

 El tiempo de confitado depende de la cantidad pero como mínimo necesitaremos entre 30 y 40 minutos, veréis como las setas van disminuyendo su tamaño y cambiando ligeramente su color.

Cuando falten diez minutos, incorporamos el bacalao, finalmente escurrimos el exceso de aceite,  emplatamos, echamos sal fina y perejil picado.

Servimos bien caliente.

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