En el año 2005 hice un viaje a Méjico, he de reconocer que el destino no fue una elección mía, mi marido se empeñó en visitar el país y yo, logré vencer todos mis miedos a visitar un país del cual, desafortunadamente muchas veces se habla sólo sobre la violencia, los robos y el crimen organizado.
A día de hoy, sólo puedo decir que ha sido uno de mis mejores viajes, de Ciudad de México a Cancún recorrimos toda la península del Yucatán, disfruté de todos y cada uno de los pueblos y ciudades que visitamos. Comenzamos en Ciudad de México, ciudad que recorrimos durante dos días que supieron a poco por la belleza y la multitud de interesantes lugares a visitar, por supuesto cumplimos con el ritual de visitar la Plaza Garibaldi en donde tomamos tequila al son de los mariachis, el Zócalo, las maravillosas pirámides de Teotihuacán, la basílica de Guadalupe...
De Ciudad de México a Puebla, Oaxaca, la preciosa y colonial ciudad de San Cristóbal de las Casas, los pueblos indígenas de San Juan de Chamula y Zinacantán, las ruinas de Palenque, Campeche, Uxmal, Mérida, Chichen Itzá y finalmente Cancún, sobre 3.000 kms. de tradición, cultura, arte, buena gente y buena comida, un viaje que tardaré mucho, mucho tiempo en olvidar.
Guardo gratos y muy buenos recuerdos de la visita, quizás lo que menos me gustó fueron los dos días de estancia obligada en Cancún ya que de allí partía nuestro vuelo de regreso a España, que desde mi punto de vista no es más que una jaula de oro para turistas en donde los hoteles se encargan de que el turista coma y beba todo lo que quiera durante todo el día y parte de la noche. Confieso que ese tipo de viajes no son para mi, aunque entiendo a quien los haga, personalmente disfruto mucho más viendo y sintiendo la realidad de un pueblo que metida en un hotel por muy abundante que sea su comida y por muy bellas que sean sus playas, eso no es conocer un país, además pienso que el dinero que yo he pagado por mi viaje no repercutirá de la misma manera en la población local, taxis, comidas en restaurantes, cervecitas a media tarde … nada de eso será posible si yo estoy dentro de un lugar gobernado por multinacionales que dejan en el país una parte ínfima a repartir entre sus habitantes.
Sé que muchas personas no estarán de acuerdo con esto, pero este es mi sentimiento con respecto a lo que a mi me parece una segunda colonización y aquí podríamos aplicar eso de poderoso caballero es don dinero.
Puede que alguien se este preguntando a que viene todo esto en un blog de cocina de setas, pues bien, durante el viaje pude encontrar en la zona de Palenque algunas setas que si bien no son comestibles, si me llamaron la atención, y de ahí nació la idea de la receta que hoy os dejo. Sé que existen algunas asociaciones micológicas y que también nacen setas comestibles, no conozco esos lugares, quizás con el tiempo logre infórmarme mejor sobre el tema y si hay algún visitante de ese país que nos quiera contar algo sobre el tema, estaré encantada de publicarlo. Al igual que cualquier apunte o comentario sobre las fajitas o burritos que tanto nos cuesta distinguir a los de afuera.
BURRITOS CON SETAS
Ingredientes:
- Pechuga de pollo
- Pimiento rojo
- Pimiento verde
- Cebolla
- Ajetes tiernos
- Setas (Pleurotus ostreatus)
- Aceite y sal
- Tortitas
- Salsa mejicana
Elaboración:
Partimos todos los ingredientes en juliana.
Sofreímos el pollo hasta que quede bien doradito, reservamos. A continuación hacemos lo mismo con los pimientos y la cebolla y por último con las setas.
Doramos los ajetes. Mientras calentamos las tortitas en el microondas según las indicaciones del fabricante.
Montamos las tortitas colocando un poco de cada uno de sus ingredientes, cerramos, añadimos la salsa y servimos bien caliente.
Pues no conozco México, pero mi tía vive allí y seguro estaría de acuerdo con tu post.
ResponderEliminarBesos,
Elena ;-)
Llevas toda la razón, esos viajes se caracterizan por todo lo que ponen a tu alcance y por lo caros que son.
ResponderEliminarSi todo ese dinero se destinara bien, mucha de esa gente viviría un poquito mejor.
A nosotros lo cierto es que nos gusta la comodidad del hotel pero teniendo al menos una de las comidas libre para tapear, recorrer y conocer.
Los burritos riquísimos, mira que nos gustan!
Aunque soy de las que no distingo burritos de fajitas, qué le voy a hacer!
Besazo.
Qué viaje tan bonito debió ser!! lo mejor que se puede hacer es intentar conocer otros lugares, otras culturas, otra gastronomía... eso nos enriquece a todos.
ResponderEliminarYo como Thermo, me lío entre los burritos y las fajitas, pero estos tuyos tienen una pinta buenísima, seguro que están de lujo
QUe precioso viaje hiciste COnchi y cuanto se aprende de cada uno de ellos verdad?
ResponderEliminarEste burrito me ha encantado, yo como las chicas no distingo entre burritos y fajitas tampoco.
Un besazo y feliz domingo
De cuerdo contigo , para conocer un país hay que salir a sus calles y hablar con su gente; además irse ten lejos para sólo tomar el sol no tiene sentido.
ResponderEliminarYo tampoco distingo fajita de burrito pero tiene muy buena pinta.
Un beso.
Yo he hecho ese mismo viaje, pero "en dos tandas": el 2002 y el 2005. Y me parece una maravilla de país.
ResponderEliminarLa idea de los burritos con setas me ha gustado mucho... bueno, es que a mí las setas también me encantan, jejeje.
Besotes, guapa.
Ah, se me olvidaba. Nosotros en la Riviera Maya estuvimos sólo 3 días en un hotel "de pulserita", pero nos alquilamos un coche y estuvimos recorriendo la zona por nuestra cuenta, y el resto del tiempo nos movimos en hoteles "normales". En el de la pulserita sólo parábamos para dormir.
ResponderEliminarComo bien dices, ese tipo de hoteles no sirven para conocer de verdad un país: para estar tomando el sol, bebiendo mojitos y sin salir del hotel, y que te dé lo mismo estar en México que en Torremolinos, me quedo en mi casa. Esos viajes no me gustan a mí tampoco.
Besotes de nuevo.
Hola guapa!! me encanta la receta y me ha encantado tu viaje. A mi tampoco me gusta el tipo de viaje de "todo aqui" para eso me quedo en mi casa, si no puedo ver y dirfrutar del sitio sus costumbres y sus gentes pues no me gasto un eurillo en que me encierren en un micro-país preparado.
ResponderEliminarMil besitos.
Elena:
ResponderEliminarSeguro que tu tía estaría encantada de recibirte y a ti te encantaría el país.
Thermo:
A mi también me gustan los hoteles buenos y su comodidad pero si eso supone estar ahí metida todo el día, pues no va con nosotros, me gusta conocer gente, hablar, pasear, callejear, en fin sentir y vivir cada lugar.
Charo:
El viaje precioso, me quedan ganas de volver para conocer otras zonas del país.
Lily:
Tienes razón, se aprenden más en un viaje que media vida estudiando geografía, jajaja.
Ángeles:
Lo dicho, conocer un país no es estar en un hotel rodeado de comida y bellas playas.
Morguix:
Qué suerte dos veces has visitado Méjico. Lo de la pulserita me puede, nosotros sólo estuvimos dos días y ni enteros, como veníamos tan cansados del viaje decidimos no movernos del hotel pero lo ideal es lo que tú has hecho, moverte por tu cuenta y conocer.
Chicas gracias a todas por vuestros comentarios y como conclusión tengo que añadir que todavía no distinguimos entre burritos y fajitas, creo que será interesante investigarlo, jajajaja.
Besossssssssss
Que bonio viaje y que bonita receta, un beso.
ResponderEliminaresta si que es una buena receta, de las buenas y ricas, me ha encantado
ResponderEliminarBesos
Que rica receta y muy buena idea para ocupar las ricas verduras de temporada,como siempre las zetas en primer lugar,viajera inpedernida,qué manera de viajar conchi,eso es una bendición,cariños.
ResponderEliminarQue deliciaaaa, me llevo la receta, un besico.
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