miércoles, 14 de septiembre de 2011

Macrolepiotas proceras empanadas

Conocida es la micofobia que ha imperado en Galicia, lugar en el que he nacido y vivo,  desde siempre,  con el paso del tiempo, gracias a la difusión que han hecho las Asociaciones Micológicas, y porque no, la moda, hemos pasado a ser un pais que recoge,  y aprecia el consumo de estos pequeños manjares que nos proporciona la naturaleza.
Durante mi infancia los fines de semana los pasaba en el pueblo, recuerdo que con la llegada del otoño surgían lo que la gente llamaba “Cogordos” y que se afanaban en recolectar y consumir, supongo que ese fue mi primer contacto con el mundo de las setas, pero no fue hasta muchos años después cuando comencé a interesarme a fondo por este increíble mundo y aprendí que su nombre es Macrolepiota procera, una seta muy apreciada por muchos, buscada y codiciada.
Hasta mi madre, que ahora consume todas las setas que le llevo, esa era la única “pieza” que conocía y cocinaba de vez en cuando, muy, muy de vez en cuando, el resto, sencillamente, no existía.
Por  entonces la cantidad de “Cogordos” (Macrolepiota procera) que nacían era mucho más grande que en la actualidad, no sé a qué será debido, aunque supongo que el abandono del campo, la búsqueda masiva y el cambio climático algo tienen que ver con ello, el caso es que cada vez me resulta más difícil encontrar buenos ejemplares.
Y para no haceros leer mucho, hoy lo dejo aquí, pero pronto os hablaré con más detalle sobre ella, sus características, sus mil nombres, su culinaria… de momento y si tenéis la suerte de recolectarla, disfrutadla con esta receta, está buenísima.




Ingredientes:
·       Setas (Macrolepiota procera)
·      Huevos
·      Harina
·      Pan rallado
·      Sal
·      Aceite
Elaboración:
Limpiamos bien las Macrolepiotas, normalmente con un paño húmedo o papel de cocina es suficiente. Las cortamos en trozos, colocamos con las láminas hacia arriba y salamos.
Rebozamos las setas en harina, huevo batido y finalmente pan rallado.
Freímos en abundante aceite de oliva, las ponemos sobre papel de cocina para eliminar el exceso de aceite y servimos. Opcionalmente podemos acompañarlas de una ensalada de tomate.

Fotografía: Isidro Frutos





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13 comentarios:

  1. La lepiota sí que la conocía, la macrolepiota será grandísima, verdad? debe ser una gusto encontrarla en el bosque.
    Besos.

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  2. Conchi en mi pueblo(provincia de Zamora pero casi en Galicia) las hemos cogido toda la vida, y como tu dices era la unica que se consumia hasta hace unos años que ha entrado la fiebre del boletus.
    Alli se conocen como cucurriles, los cerrados cubetos y las grandes y abiertos trigueras....buf que recuerdos.
    Un beso

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  3. Suelo hacer las Macrolepiotas de forma parecida, pero uniendo 2 sombreros de tamaño similar y poniendo dentro una loncha de jamón cocido y otra de queso a modo de sandwich, aunque son tan sabrosas que están ricas de cualquier forma.

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  4. Ángeles:
    Hay Lepiotas y Macrolepiotas, debemos tener mucho cuidado en no recogerlas con el sombrero inferior a cinco centímetros ya que se puede tratar de alguna Lepiota de pequeño tamaño que sea tóxica o venenosa. Dentro del grupo de las Macrolepiotas también existe alguna no comestible, por ello, la información y el estudio de las mismas es básico.
    Por otra parte, tienes razón, algunas tienen un tamaño realmente grande.

    Sandoa:
    La fiebre del Boletus se ha desatado en todas partes, jajajaja, aunque el mundo micológico es tan amplio que si de verdad te interesa no te debes quedar sólo aquí, cierto es que quizás ese sea el género en el nos iniciamos muchos. Me gusta el nombre que le dais por ahí, me lo guardo para un próximo artículo.

    José:
    Así también las he cocinado, pero dame tiempo, jajajaja, ya subiré la receta más adelante. Es verdad que están muy buenas y de esa manera recuerdan a un San Jacobo, rico, rico.

    Gracias a los tres
    Besos

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  5. Que curioso el nombre, de esto no conozco nada, pero así empanaditas me las pones y no te dejo ni una.

    Saludos

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  6. Me encanta la idea de empanar las setas, las probaré aunque supongo que no será de la misma familia ni será lo mismo.Besicos.

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  7. Una amiga las hacía así, empanadas, yo nunca las había visto y mira que me llamaron la atención.
    Se ven tan ricas!
    Besazos.

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  8. Que curioso el nombre, pero así cocinadas no te dejo ni una.
    Besos

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  9. nunca he comido las setas empanadas, en guisos si, con ajo, con chorizo... pero no empanadas. Se ven muy apetitosas, te copio la idea

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  10. José Manuel:
    Macrolepiota procera es el nombre científico, pero en cada lugar, cada zona y casi podría decir que cada pueblo tiene un nombre. Otro día os contaré más cosas sobre ella.

    Cocinera:
    Esta seta es ideal para este tipo de preparación, intenta hacerlo con setas que tenga poco agua.

    Thermo:
    Pues ya sabes, a buscar y a cocinar, jajaja

    Elena:
    Seguro que en donde tienes tu casa las hay, pregunta a los lugareños y seguro que alguna te darán.

    Charo:
    Están realmente buenas, a nosotros nos gustan mucho de esta manera.

    Besos y gracias por vuestros comentarios.

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  11. Eu comera o cogordo simplemente salteado con allo e sal. Máis así rebozado ten que estar moi bo. Son interesantes os "introitos" que fas en cada entrada.
    Bicos.

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  12. Ais, me encantan asi...con alioli pa mojaaa, que ricas, y estas si que las conozco jeje,¡me atrevo!!
    Aunque tengo que tener cuidado con mi señor marido, toda su vida su madre le metio en la cabeza que te vas a moriri con solo mirar una seta y aún no he conseguido domesticarlo del todo jajajja.
    Biquiños, felíz fin de semana!!

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  13. Por aquí me temo que también hay bastante micofobia... o pocas setas, por el clima, jejeje. Ya quisiera yo vivir en una zona como la tuya, o como Soria o Cataluña, donde hay tantísimas variedades donde elegir.
    Si consigo "pillar" algo parecido a la macrolepiota (antes traían muchas setas diferentes al Corte Inglés, pero con la crisis ya hay pocas variedades), me encantaría probar esta receta. Si no, pues tendré que empanar al alguna seta de cardo grande, ¡qué se le va a hacer, jajaja!.
    Un beso grande, guapa.

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